Se llama Rebeca, es una chica algo maliciosa la cual sabe que es atractiva y por lo mismo puede conseguir casi todo lo que quiere, le gusta jugar con los sentimientos de hombres que no están tan maleados como ella, los encandila con sus jugueteos y obtiene de ellos lo que busque en ese momento y luego los desecha, se puede decir que hasta es un poco cruel aunque en ocasiones se topa con hombres que son de su misma condición, es una chica superficial con el ego muy crecido y que cree que por el hecho de ser bonita y de buen cuerpo merece que le hagan todo y le den todo, se siente la flor más hermosa del jardín y que nadie en este mundo la merece.
Rebeca siempre tenia infinidad de pretendientes para disponer del que quisiera y cuando ella quisiera, pero de entre todos siempre se destacaba uno de nombre Rubén, era el que tenia los mejores detalles para con ella y a su vez Rebeca le daba migajas para tenerlo siempre cerca, como una especie de seguro de protección por alguna contingencia ya que los demás al darse cuenta de cómo es Rebeca terminan por hartarse y se van, todos menos Rubén.
¿Porque será que muchas ocasiones las personas nos enfrascamos en situaciones a pesar de que sabemos que no nos convienen, o que con certeza nos causaran daño en un futuro y aun así no queremos ver la precaria situación en la que nos encontramos?, así estaba Rubén, siempre soñando por Rebeca y pensando que algún día ella se daría cuenta que el era el hombre destinado para ella, un pensamiento sin duda romántico pero poco realista.
Es sabido que las personas no son todas tan malas ni tampoco tan nobles sino una combinación de todo y así mismo Rebeca, en momentos se llegaba a sentir sola ya que la gente terminaba alejándose de ella o a su vez la usaban y luego la botaban como ella lo hacía con los hombres que así se lo permitían, también es sabido que las costumbres y la forma de ser de las personas son muy difíciles de cambiar, así que cuando encontraba a alguien que realmente se preocupara por ella y le brindara cariño, ella recurría de nuevo a sus a arraigadas andanzas.
Rubén trabajaba en un bar ubicado en la colonia Condesa el cual era muy frecuentado por chicos de buena posición económica o más bien dicho sus padres, cierta noche Rebeca fue a este bar con dos amigas en plan de conquista de algún chico riquillo, conocieron a tres amigos los cuales se veían de muy buena familia y empezaron los coqueteos, el primero muy seguro de si mismo se acerco a Rebeca y le ofreció un trago junto con sus amigas, después las invito a sentarse en su mesa con sus amigos y así lo aceptaron. Rubén al percatarse de la situación y darse cuanta de que una de ellas era Rebeca empezó a sentir muchos celos y coraje, sin embargo no hacía nada al respecto por miedo o prudencia de no ser despedido al propiciar un problema en el bar.
Fue pasando el tiempo y el alcohol para las 6 personas de aquella mesa y los celos de Rubén cada vez eran más insoportables, sobre todo cuando la mano de aquel tipo acariciaba las piernas de Rebeca y ésta lo besaba, Rubén sentía sus venas explotar en su rostro.
“Rubén, ¿Qué ves en esa mesa?, Ponte trabajar” le llamo la atención su gerente “Ve y levanta los muertos la mesa quince que ya tiene cinco minutos sucia, y no quiero ver que estés perdiendo el tiempo”, el solo respondió “si señor” y se dirigió a levantar los vasos sucios de la mesa quince y limpiarla.
Al regresar de limpiar la mesa vio al tipo que salía del baño y escucho que le decía a su amigo “Se ve que esas viejas son bien putas seguro hoy cogemos”, cuando escucho esto Rubén algo se prendió dentro de él y ya no le importo más el lugar donde se encontraba o si perdía su trabajo, solo se abalanzo hacia él reventándole un vaso en la cabeza y después a golpes, empezó la pelea dentro del bar y por el exceso de alcohol los tres amigos no pudieron hacer mucho en la pelea y ésta llego afuera del bar, Rebeca solo le gritaba a Rubén “déjalo, déjalo, animal”, los tres amigos se ayudaron mutuamente y se alejaron gritándole a Rubén una serie de maldiciones y amenazas “te vas a arrepentir pinche naco, no sabes con quien te metiste, ya te dije te vas a arrepentir, te vas a arrepentir” se subieron a su auto y arrancaron, Rebeca solo le gritaba a Rubén “¿Estás loco? ¿Qué te pasa? ¿Quién te crees?” Rubén aun con la adrenalina en todo su cuerpo y cerebro apenas sabia lo que pasaba a su alrededor, mientras tanto el auto que apenas acababa de arrancar dio una vuelta en u y regresaron por la misma calle, uno de los tres ocupantes asomo una mano del auto y se escucharon tres tiros, después arrancaron a toda velocidad.
Resulto que aquel muchacho era hijo de un político que ocupaba un alto cargo en gobierno, en el periódico a la mañana siguiente apareció un encabezado que decía “Fatalidad en la Condesa a causa del alcohol”, en el articulo por extrañas razones nunca mencionaron al hijo del político y las únicas declaraciones fueron las del jefe de policía que investigarían para encerrar a los responsables y de ciertos testigos del suceso que no pudieron identificar a los agresores.
Si tan solo Rubén se hubiera querido más a sí mismo para darse cuenta que su obsesión con Rebeca solo le traería problemas, si Rebeca hubiera modificado su conducta al darse cuenta que se estaba quedando sola y dejara de ser tan superficial, si tan solo aquel político hubiera educado mejor a su hijo, si tan solo los tres amigos no hubieran estado tan alcoholizados como para pensar mejor sus acciones, si tan solo la sociedad no permitiera que alguien pueda actuar con impunidad por el simple hecho de ser hijo de algún político, o tal vez si no tuviéramos la absurda cultura colectiva que por el simple hecho de tener una mejor posición económica nos sentimos superiores a los demás, tal vez solo así aquel articulo no hubiera sido publicado a la mañana siguiente con una foto a blanco y negro, en la cual se veía a Rebeca con las manos en el rostro llorando hincada a un lado del cuerpo de Rubén, pero como también es sabido el hubiera no existe.
Rebeca siempre tenia infinidad de pretendientes para disponer del que quisiera y cuando ella quisiera, pero de entre todos siempre se destacaba uno de nombre Rubén, era el que tenia los mejores detalles para con ella y a su vez Rebeca le daba migajas para tenerlo siempre cerca, como una especie de seguro de protección por alguna contingencia ya que los demás al darse cuenta de cómo es Rebeca terminan por hartarse y se van, todos menos Rubén.
¿Porque será que muchas ocasiones las personas nos enfrascamos en situaciones a pesar de que sabemos que no nos convienen, o que con certeza nos causaran daño en un futuro y aun así no queremos ver la precaria situación en la que nos encontramos?, así estaba Rubén, siempre soñando por Rebeca y pensando que algún día ella se daría cuenta que el era el hombre destinado para ella, un pensamiento sin duda romántico pero poco realista.
Es sabido que las personas no son todas tan malas ni tampoco tan nobles sino una combinación de todo y así mismo Rebeca, en momentos se llegaba a sentir sola ya que la gente terminaba alejándose de ella o a su vez la usaban y luego la botaban como ella lo hacía con los hombres que así se lo permitían, también es sabido que las costumbres y la forma de ser de las personas son muy difíciles de cambiar, así que cuando encontraba a alguien que realmente se preocupara por ella y le brindara cariño, ella recurría de nuevo a sus a arraigadas andanzas.
Rubén trabajaba en un bar ubicado en la colonia Condesa el cual era muy frecuentado por chicos de buena posición económica o más bien dicho sus padres, cierta noche Rebeca fue a este bar con dos amigas en plan de conquista de algún chico riquillo, conocieron a tres amigos los cuales se veían de muy buena familia y empezaron los coqueteos, el primero muy seguro de si mismo se acerco a Rebeca y le ofreció un trago junto con sus amigas, después las invito a sentarse en su mesa con sus amigos y así lo aceptaron. Rubén al percatarse de la situación y darse cuanta de que una de ellas era Rebeca empezó a sentir muchos celos y coraje, sin embargo no hacía nada al respecto por miedo o prudencia de no ser despedido al propiciar un problema en el bar.
Fue pasando el tiempo y el alcohol para las 6 personas de aquella mesa y los celos de Rubén cada vez eran más insoportables, sobre todo cuando la mano de aquel tipo acariciaba las piernas de Rebeca y ésta lo besaba, Rubén sentía sus venas explotar en su rostro.
“Rubén, ¿Qué ves en esa mesa?, Ponte trabajar” le llamo la atención su gerente “Ve y levanta los muertos la mesa quince que ya tiene cinco minutos sucia, y no quiero ver que estés perdiendo el tiempo”, el solo respondió “si señor” y se dirigió a levantar los vasos sucios de la mesa quince y limpiarla.
Al regresar de limpiar la mesa vio al tipo que salía del baño y escucho que le decía a su amigo “Se ve que esas viejas son bien putas seguro hoy cogemos”, cuando escucho esto Rubén algo se prendió dentro de él y ya no le importo más el lugar donde se encontraba o si perdía su trabajo, solo se abalanzo hacia él reventándole un vaso en la cabeza y después a golpes, empezó la pelea dentro del bar y por el exceso de alcohol los tres amigos no pudieron hacer mucho en la pelea y ésta llego afuera del bar, Rebeca solo le gritaba a Rubén “déjalo, déjalo, animal”, los tres amigos se ayudaron mutuamente y se alejaron gritándole a Rubén una serie de maldiciones y amenazas “te vas a arrepentir pinche naco, no sabes con quien te metiste, ya te dije te vas a arrepentir, te vas a arrepentir” se subieron a su auto y arrancaron, Rebeca solo le gritaba a Rubén “¿Estás loco? ¿Qué te pasa? ¿Quién te crees?” Rubén aun con la adrenalina en todo su cuerpo y cerebro apenas sabia lo que pasaba a su alrededor, mientras tanto el auto que apenas acababa de arrancar dio una vuelta en u y regresaron por la misma calle, uno de los tres ocupantes asomo una mano del auto y se escucharon tres tiros, después arrancaron a toda velocidad.
Resulto que aquel muchacho era hijo de un político que ocupaba un alto cargo en gobierno, en el periódico a la mañana siguiente apareció un encabezado que decía “Fatalidad en la Condesa a causa del alcohol”, en el articulo por extrañas razones nunca mencionaron al hijo del político y las únicas declaraciones fueron las del jefe de policía que investigarían para encerrar a los responsables y de ciertos testigos del suceso que no pudieron identificar a los agresores.
Si tan solo Rubén se hubiera querido más a sí mismo para darse cuenta que su obsesión con Rebeca solo le traería problemas, si Rebeca hubiera modificado su conducta al darse cuenta que se estaba quedando sola y dejara de ser tan superficial, si tan solo aquel político hubiera educado mejor a su hijo, si tan solo los tres amigos no hubieran estado tan alcoholizados como para pensar mejor sus acciones, si tan solo la sociedad no permitiera que alguien pueda actuar con impunidad por el simple hecho de ser hijo de algún político, o tal vez si no tuviéramos la absurda cultura colectiva que por el simple hecho de tener una mejor posición económica nos sentimos superiores a los demás, tal vez solo así aquel articulo no hubiera sido publicado a la mañana siguiente con una foto a blanco y negro, en la cual se veía a Rebeca con las manos en el rostro llorando hincada a un lado del cuerpo de Rubén, pero como también es sabido el hubiera no existe.
